30/3/09

Este sábado celebramos la Primavera

Amaneció nublado y algo lluvioso. A lo largo de la mañana salió el sol y los colores adquirireron un nuevo brillo. También nosotr@s nos dejamos sentir la primavera en el cuerpo: fuimos semillas al abrigo de la tierra, nos nutrimos de ella y de la lluvia, del sol, del calor, de la música...

Al igual que la naturaleza entera, sentimos ese impulso vital de renovación y nos dejamos reverdecer, rebrotar o incluso florecer. Nuevos brotes, nuevas ramas, nuevas ilusiones, nuevas esperanzas y deseos para nuestro presente, para esta primavera que empieza.

Es dificil de contar, difícil de compartir cuando no se ha experimentado en el propio cuerpo. Estoy segura de que las imágenes y la música que veréis en este video os ayudarán a recordar la experiencia... o imaginarla, si no la vivisteis.

Que la primavera nos traiga la posibilidad de echar los nuevos brotes que estamos necesitando en estos momentos de nuestras vidas.

4 comentarios:

Beatriz dijo...

¡qué gozada! así da gusto dar la bienvenida a la primavera. Enhorabuena por el taller, seguro que os ha aportado mucho.

Las mujeres del corro dijo...

Es el momento de la germinación, puedo sentirlo y puedo verlo. Me convierto en semilla-embrión - embrión-semilla.
Resguardada en el vientre cálido de la madre-tierra - tierra-madre, aguardo el momento de renacer. Aquí me siento segura.
Mientras, el invierno va pasando y me trae la lluvia a veces tormentosa, la escucho, la saboreo, la huelo, la siento. También me trae el viento y una tenue luz. Todo se convierte en música y siento como me nutre, me alimenta, me sostiene.
Escucho los latidos de mi corazón, la esperanza, la ilusión, la vida queriendo rebrotar. Poco a poco el aire se vuelve más cálido y los días son más largos.
Empiezo a escuchar el canto de los pájaros, mi corazón late con ganas y comienzo a salir a la superficie buscando esa nueva luz y calor. Siento como mi cuerpo se llena de brotes, muchos son nuevos, es una explosión de alegría y de vida, es la transformación. Renazco, voy hacia la luz, la música me acaricia, el aire y los olores que le acompañan me envuelven. Reconozco estas sensaciones, me emociono y disfruto del crecimiento al abrigo del sol, sintiéndome cuidada.
Me detengo en los nuevos brotes, los escucho, los acaricio, me emociona sentirlos.
Y desde la emoción, la escucha y el amor, agradezco al invierno el cobijo y alimento me donó.

Y a ti Lourdes mil gracias por regalarme este sabadito en tu jardín.

Un beso muy fuerte Reineta

Reyes

Las mujeres del corro dijo...

¡¡Hola!!
Me senti muy bien y disfrute mucho compartiendo con todos vosotr@s esas sensaciones.
Me hice crecer como persona. Folerecieron en mi algunas florecillas.
Deseo que lo repitamos.
Un beso para tod@s.

Montse

Las mujeres del corro dijo...

Es el momento de la germinación, puedo sentirlo y puedo verlo. Me convierto en semilla-embrión - embrión-semilla.
Resguardada en el vientre cálido de la madre-tierra - tierra-madre, aguardo el momento de renacer. Aquí me siento segura.
Mientras, el invierno va pasando y me trae la lluvia a veces tormentosa, la escucho, la saboreo, la huelo, la siento. También me trae el viento y una tenue luz. Todo se convierte en música y siento como me nutre, me alimenta, me sostiene.
Escucho los latidos de mi corazón, la esperanza, la ilusión, la vida queriendo rebrotar. Poco a poco el aire se vuelve más cálido y los días son más largos.
Empiezo a escuchar el canto de los pájaros, mi corazón late con ganas y comienzo a salir a la superficie buscando esa nueva luz y calor. Siento como mi cuerpo se llena de brotes, muchos son nuevos, es una explosión de alegría y de vida, es la transformación. Renazco, voy hacia la luz, la música me acaricia, el aire y los olores que le acompañan me envuelven. Reconozco estas sensaciones, me emociono y disfruto del crecimiento al abrigo del sol, sintiéndome cuidada.
Me detengo en los nuevos brotes, los escucho, los acaricio, me emociona sentirlos.
Y desde la emoción, la escucha y el amor, agradezco al invierno el cobijo y alimento me donó.

Y a ti Lourdes mil gracias por regalarme este sabadito en tu jardín.

Un beso muy fuerte Reineta
Reyes

bienvenid@s a contradanza

Este blog es, por ahora, un espacio relativamente nuevo para mí. No lo es, sin embargo, el espacio corporal, el de la sensibilidad, las sensaciones y emociones que surgen del contacto con esa sabiduría interna que existe en cada un@ de nosotr@s, a pesar de la tendencia cotidiana a vivir de espaldas a ella, ignorándola, menospreciéndola, infravalorándola...
Tomar conciencia de esa parte nuestra, despertar, reconocer y respetar a esa dimensión por sí misma, más allá de las razones y los juicios; dejar que se exprese, que cuente lo que ni siquiera ha pasado aún por la mente; abandonarse al lenguaje del movimiento o de la quietud; sentir cómo la música o el silencio bañan el cuerpo por dentro y por fuera, lo transforman y lo aproximan a la conciencia... ha sido y sigue siendo parte de mi sanación, de mi consuelo, de mi riqueza y de mi crecimiento como persona, como mujer...
Me apetece compartir lo que conozco desde mi propio contacto con el cuerpo, con la música, con el movimiento, con una danza cuya única técnica consiste en poder abandonarse a escuchar los mensajes internos y dejar que éstos se expresen en un lenguaje personal y único que surge y se desarrolla sin el control y la restricción del juicio y de la mente.
Sé que comparto esto con mucha gente. Sé que muchas personas buscan y se encuentran en este mismo espacio. Por eso me apetece compartirlo. Te invito pues a que también tú lo cuentes, lo expreses, lo compartas... En sesiones individuales, en los grupos, o en alguno de los talleres de fin de semana.